dimarts, 16 de gener del 2007

Los aullidos del PP



Fecha: 04-08-2006 11:46

El PP está acorralado por sus propias mentiras y contradicciones, y con la ausencia de sensibilidad que le es propia ha hecho un llamado a algunos de sus secuaces para que aúllen en este foro, incurriendo, como es habitual en ellos, en torticeras mentiras, descalificaciones personales e, incluso, en insultos de la más baja ralea que alguien pueda imaginar, como se atreve a hacer un tal Pedro del Río, llamando "repugnante" a Juan Antonio Díaz, que intervino en este foro con el dolor por la ausencia in eternum de su sobrino, LUIS SAIZ, tristemente fallecido, junto a otras 42 víctimas más, en la tragedia NO NECESARIA de la línea 1 del Metro, tragedia que se podría haber evitado si los mandamases del PP valenciano hubieran cuidado honradamente de los dineros públicos y hubieran mantenido en condiciones la tan reiteradamente denunciada línea 1, la llamada por el pueblo "línea de los pobres". Este tal señorito, Pedro del Río, se atreve a arañar la dignidad del señor Juan Antonio Díaz, pretendiendo acallar su dolor e indignación, ¿tampoco tiene uno derecho a quejarse de que le hayan mutilado un trozo de su corazón?, ¿qué pretenden, machacarnos, destrozar nuestras vidas y que callemos? Pues NO. Los tiempos del dictador acabaron ya, y más vale que no remuevan ustedes la memoria, que la paciencia tiene unos límites. Dejen de provocar, y, al menos, tengan un poco de dignidad -si saben lo que esto es- y callen. Además, señores del PP, dimitan, váyanse ya de una y déjennos vivir en paz. Ahora se sacan de la manga a unos personajes ajenos a la Comunidad Valenciana, uno, vasco, otra, francesa, y que, renegando de sus orígenes, "cantan" las "glorias valencianas", negando lo evidente: la Valencia oscura, abandonada y sucia, y sólo tienen ojos para el cartón-piedra-fachada de la ciudad; al igual que sus ojos se ofuscan ante la invasión del cemento obsceno, que nos invade y agobia, pero que llena los bolsillos de algunos. Cállense, como mínimo, señores del PP. Tengan vergüenza, miren a los cuatro puntos cardinales de España y observen cómo la corrupción les impregna. Tengan, si pueden, algo de decencia, y váyanse por el foro.